La iniciativa de llevar a proceso penal a César Duarte Jáquez, Jaime Herrera Corral y Carlos Hermosillo Arteaga está en las manos de la ciudadanía. El expediente AP/PGR/UEAF/001/2014-09, abierto el 23 de septiembre de 2014 ante la PGR, aporta ya los elementos con pruebas suficientes y consistentes para que esta instancia lo consigne, se les aprehenda y respondan por sus crímenes ante los tribunales y la sociedad.
Es una tarea que se propuso como una apuesta por el derecho y un reto a las instituciones y así continúa. Lo que no hagan los ciudadanos en contra de la corrupción no lo hará nadie; además conviene que esta fuerza sea la que se imponga y triunfe porque es uno de los grandes compromisos a lo largo de los últimos tres años que se trabaron con la sociedad y no se ha abandonado nunca. Unión Ciudadana es, ha sido y será la pieza clave para que el pueblo abone en su favor el éxito que sus esfuerzos merecen.
Unión Ciudadana deplora que el poder público de Chihuahua prácticamente haya abandonado este expediente. A la hora de la fundación del brazo cívico el 28 de noviembre de 2014, el actual gobernador dijo que la denuncia contra el duartismo era “robusta” y que además estaba apoyada en un “arsenal de pruebas”, lo que es indiscutiblemente cierto, y nos extraña, por eso subrayamos que hasta este momento no haya hecho un pronunciamiento puntual de exigencia a la PGR para que se proceda, porque así corresponde al bien público. Vemos el abandono de un compromiso público que los ciudadanos no olvidan.
Unión Ciudadana hace del conocimiento público que hace tres semanas solicitó entrevista con el gobernador Javier Corral para tratar y dialogar sobre este tema, sin obtener respuesta alguna, lo que es un desacato al derecho a ser oídos y la obligación pública de escucharnos. No se nos ha dicho que sí, y la negativa la entendemos como un “no”, lo que es francamente una omisión que no merece una lucha en la que él participó y contribuyó a enriquecer y hoy se niega en la realidad a tratar de frente. Esto es una ingratitud.
Unión Ciudadana es un brazo cívico no partidario, independiente del estado y del gobierno, y quiere encontrar en la participación ciudadana la fuerza suficiente para que no haya más dilación en la lucha contra los tiranos desbancados y a los que se les ha dado la oportunidad para irse rehaciendo en sus fortalezas, cuando lo justo y necesario es sentar las más sólidas bases para suprimir las raíces de la tiranía y el despotismo, castigando a los responsables de la corrupción, la destrucción de las instituciones y estableciendo un precedente para que esto ya no suceda en el futuro.
Congruentes con estas premisas, Unión Ciudadana refrenda su compromiso, continúa en la lucha y en lo inmediato emprenderá acciones jurídicas y sociales para que su programa fructifique. En ese marco, el día de hoy, ante un Juzgado de Distrito en materia administrativa de la Ciudad de México, está reclamando el amparo y protección de la justicia federal para que la PGR deje de ser la cómplice de César Duarte y sin mayor dilación se turne el expediente a los tribunales. Detrás de este amparo la víctima es el pueblo de Chihuahua; quien lo firma, Jaime García Chávez, acredita el interés jurídico para obtener un fallo protector, no en su beneficio sino en beneficio de todos.
La justicia debe ser pronta y expedita; las garantías y los derechos humanos han de prevalecer. La verdad está acreditada, los delitos son evidentes y han de castigarse. Hoy, como ayer, la tarea es de los ciudadanos, lo que debe dejar de ser una frase para convertirse en una realidad en su despliegue organizativo que hoy pide Unión Ciudadana, para que todos logremos cumplir la tarea que emprendimos en 2014.
Dando click en la imagen se puede descargar el contenido de la demanda de amparo.
Exigiremos mediante una campaña ante el Juez Décimo de Distrito en Materia Administrativa de la Ciudad de México y de la Presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación honrar su compromiso con la centenaria Constitución de 1917 y se atraviesen al despotismo presidencial y la protección de la corrupción que en Chihuahua tiene nombres: César Duarte, Jaime Herrera y Carlos Hermosillo Arteaga.
¡Estamos de pie!
…Me deja la impesión de haber entrado en contacto con un hombre de sorpendente originalidad, de visión multiple, de gran estatura moral y fuerza espiritual. Otras y otros han afinado, estilizado o modificado esta visión. Hay quienes no comparten sus opiniones sustentadas, pero a pesar de ello, subsisten el asombro, la admiración, el reconocimiento a su valentía para enfrentar a la poderosa corrupción y, sobre todo, su irreductibilidad a formar manada. Sus meditaciones literarias, sus críticas fundadas, sus demandas fundamentadas corren en una época que pasa por un periodo de oscura penitencia. Nada de eso parece desalentarlo. Por el contrario , se goza en la pelea. Si toda su vida no se ha cansado de decir que el de México es un pueblo envilecido y que todos los gobiernos de la revolución posteriores a Madero han sido integrados por ladrones y sinvenguenzas, el acepta como un reconocimiento a su integridad y congruencia los escupitajos de esa parte del pueblo y de ese puñado de pillos e incompetentes que descargan sobre su persona. Parece que es consciente del papel que representa: si la sociedad no lo ha apoyado como debiera; si le ha dado la espalda cuando cuando continua dispuesto a redimirla, si los políticos y sus secuaces lo consideran un viejo frustado, el se permite comportarse como le dé la gana, para demostrar lo que los políticos han logrado hacer del país y hasta de él mismo. Si México se ha envilecido y desquiciado, si la razón se ha extraviado y la justicia pisoteada, él jugará un papel acorde con las circunstancias. Bien sabe que el verdadero responsable es el engranaje de corrupción urdido por los gobiernos de la revolución traicionada. Luces diáfanas iluminan su sendero…..