Tiene fama pública nacional e internacional el exgobernador de Quintana Roo Mario Villanueva. Desde el poder cometió delitos que lo ligan al lavado de dinero y al narcotráfico. A partir de 2001, año en que fue aprehendido, ha estado en cautiverio y con un tiempo en cárceles de Estados Unidos a donde se le extraditó. Actualmente está preso en Quintana Roo y, apegándose a la ley, ha hecho diversas solicitudes para que se le conmute la pena y sortearla en su propia casa, aduciendo edad avanzada y precaria salud.
Recientemente el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, declaró al respecto: “Vamos a seguir con la gestión y es mi compromiso de que va a quedar en libertad”. De acuerdo a su dicho, se respetará la autonomía de la Fiscalía General de la República y está en trámite una Ley de Aministía que le otorgaría beneficios amplios al exgobernador y en general a otros reclusos que están en condiciones difíciles, sea por edad avanzada, salud, o simplemente porque el dictado de sus sentencias han sufrido una dilación inadmisible, a la luz del principio de que la justicia debe ser pronta y expedita.
En particular llama la atención de esta columna que siendo Villanueva un político en dificultades precisamente por la corrupción que practicó, reciba el beneficio de que el presidente prácticamente ya está adelantando que tiene “como compromiso” ponerlo en libertad. No niego que, si conforme a derecho, eso es posible; empero, el que sea López Obrador quien muestre esa solícita blandura llama a una preocupación más de esta Cuatroté.
Lo digo porque la noticia la ha de endulzar los oídos al exgobernador Duarte y a su cómplice Jaime Ramón Herrera Corral. Si por la víspera los días, cabe la pregunta: ¿Tiene sentido mantener alguna esperanza en el gobierno de la república?
AMINISTIA Y DELITOS DE CORRUPCION: ES UNA LARGA Y SURTIDA HISTORICIDAD DE ESTE TIPO DE DELITOS EN EL EJERCICIO PUBLICO Y PRIVADO, DELINCUENTES ENTRAN, DELINCUENTES SALEN Y OTROS SE VAN «JUNTO CON LA HEBRA» O SEA SIN PAGAR SUS ILICITOS, AL PARECER PROBLEMA QUE CADA VEZ SE AGUDIZO EN LOS ULTIMOS CINCUENTA AÑOS, Y EL ASUNTO, MAS ALARMANTE Y DE MAGNITUDES INIMAGINABLES «LA REALIDAD SUPERO A LA FICCION», SE ESPECIALIZARON LOS DELINCUENTES DE CUALQUIER TIPO Y «RANGO» SEGUN LOS MONTOS EN ROBO, LOS CASOS QUE NOS DAMOS CUENTA Y OTROS…QUE NO SALEN A LA LUZ PUBLICA, POR QUE LOS ¡TAPAN! LOS MISMOS DE MENTALIDAD VENTAJOSA Y CORRUPTA, ARREGLAN Y SE LAS ARREGLAN DE «ARREGLAR», Y EL EXPERTO EN «LITIS» PONDRA EMPEÑO EN SU ¡CLIENTE!, QUE SON LOS QUE VAN PELIANDO SU EXONERACION. EL SR. VILLANUEVA CASO AÑEJO, MAS NO IGNORADO POR EL PUEBLO COMO EXPECTADOR Y OTRAS VECES, ACOSTUMBRADOS AL NO PASA NADA, INCLUSO ORQUESTADOS ESOS DELITOS ¡MUY ALARMANTES!!..POR QUIENES PUEDEN FRENAR DICHOS DELITOS Y DELINCUENTES….EL CASO VILLANUEVA, MUY DE LA HISTORIA INMEDIATA, CON PENAS EN EL QUE HASTA QUE PUNTO, QUEDA TAMBIEN EL PRESIDENTE, LIMITADO PARA SU INTERVENCION….LAS FISCALIAS EN LOS ESTADOS ESTAN OBLIGADAS A HACER LO PROPIO…EL CASO CHDJ, LLENA DE INDIGNACION….Y MAS VALE NI QUEDE IMPUNE…
Nunca, desde la campaña 2018 era previsible, todavía hay una mayoría relativa de ciudadanos mexicanos que los respaldan a él y a su obtusa secta política llamada MORENA, pero para finales de Diciembre de 2019 o finales de febrero 2020, ya mi siquiera estarán en la posibilidad de refrendar en 2021 las curules que en las intermedias lograron los gobiernos de la democracia, Fox y Calderón, tendrá que haber co-Gobierno y parlamentarismo, será álgida la política pero como país avanzaremos bien por la vía democrática, retomando la buena política y haciendo a un lado la politiquería. Por lo anterior, pese a sus evidentes yerros conceptuales y materiales, el Presidente debe seguir los 6 años de su encargo, nunca más volvamos al siglo XIX y principios del 20, el cuartelazo, menos aún la revolución y peor aún la dictadura, de izquierda o de derecha, tampoco la dictadura perfecta del PRI en el siglo XX, sino un régimen y eventualmente un sistema más parlamentario y cada vez menos presidencialista, por todo ello, defendamos la democracia desde cualquier trinchera ideológica.