Sobre la escena pública se encuentran bastantes hechos que nos dicen que a Andrés Manuel López Obrador muy poco o nada le importa la Constitución, el Estado de derecho y el régimen de facultades expresas y limitadas que establece aquella. Está en marcha, con tonalidades de demagogia, y con un afán patrocinador de la tiranía amlista, la consulta para que se decida si se ejercita la acción penal en contra de los expresidentes. Claro, de los últimos expresidentes, porque no creo que quiera juzgar a su inspirador Luis Echeverría Álvarez.
Podrán decir lo que quieran los aduladores y vividores de la llamada Cuatroté, pero no se requiere consulta alguna para ejercer la acción penal cuando hay materia para hacerlo. Es más, es una obligación pública proceder. Pareciera que el presidente tiene miedo a tomar decisiones, o bien que está pensando en eternizarse en el cargo para realizar su proyecto político. Su tiempo es sexenal y ya casi termina el 50%.
Para mí, está claro que los expresidentes cometieron faltas mayores y que deben rendir cuentas a la justicia y ser castigados en su caso. Empezando por Enrique Peña Nieto, que prohijó la corrupción más grande de la que se tenga memoria en años recientes. Entonces, ¿por qué le tiembla la mano a AMLO? ¿Le interesa más la aclamación popular que cumplir con la ley?, sobre todo si nos hacemos cargo de que esa aclamación ya no le servirá para candidatura alguna, pues su tiempo ha terminado, y son sólo seis años. O menos.
No sea miedoso presidente, está obligado a actuar, déjese de farsas, de consultas populacheras y tumultuosas.
Dice López Obrador que ganó su partido MORENA y que por eso está: “Feliz, feliz, feliz…”, la realidad es que: GANAMOS SUS OPOSITORES, PUES, YA SE ACABÓ EL SEXENIO, incluso antes que el quinquenio perdido de Corral. Ya que el Presidente se deje de chirinolas y se ponga a trabajar, que sus resultados en materia económica están pésimos (antes incluso de la contingencia) y que las clases medias no dan para seguir pagando tantos subsidios clientelares, de seguir así el país va a tronar, lo bueno es que los “aspiracionistas” siguen con ahínco trabajando arduamente y no están interesados en las teatralidades públicas, que debieran ser cuestiones de Estado, pero que de estultos y superficiales como Corral y AMLO, pasan a segundo plano, con cortinas de humo estilo PRI. Ya nadie va a caer en el juego idiota de AMLO, salvo sus más adictos partidarios de: rifas, tirarse al piso a llorar pidiendo “revocación de mandato”, tapar la #NegligenciaCriminal en la #Línea12NoSeOlvida para no acabar más los sueños de Marcelo ni de Claudia (Monreal se ve más sensato que ellos), evadir la responsabilidad en el doloroso tema de Múzquiz, que también fueron vidas humanas, etc. La vida sigue, SE ACABÓ el sexenio, AMLO es inútil.
Ah y claro, lo del juicio a los ex Presidentes es otra chirinola sacada de la chistera, no la va a poder operar en menos de 3 años, Corral no pudo en 5 años, se les acabaron sus chirinolas a Corral y a AMLO, afortunadamente Corral en 83 días se va y López Obrador que se ponga a trabajar, YA, el país exige resultados en materia económica de inmediato.
Qué edad tiene usted, Trini. Me inquieta saber el dato debido a la manera en que redacta. Saludos