Los 80 años de la ONU
Hoy la ONU cumple 80 años. Un día como este, en San Francisco, California, se creó el organismo que agrupó a estados más longevos, en un mundo plagado de conflictos, incertidumbres y zozobras. Es el agrupamiento más importante de la posguerra y surge como un mecanismo a la hora de la derrota bélica del totalitarismo nazifascista para alentar la paz, la seguridad, la cooperación, los derechos humanos y propugnar el gran valor del derecho internacional frente a anquilosadas visiones de estados que aun hoy se escudan en la soberanía para cometer todo tipo de barbaries.
México es país fundador, es un Estado que estuvo desde el primer día en este notable esfuerzo de las naciones. Históricamente fue Luis Padilla Silva nuestro primer embajador permanente, desde octubre de 1945, cuando que se concretaba la Carta de las Naciones Unidas.
En el centro de la ONU está la búsqueda de la paz, no sólo como ausencia de guerra sino como construcción de las bases económicas, educativas y culturales que la hacen posible. En ese sentido, van los acuerdos más importantes de la Asamblea General y la creación de organismos especializados para obtenerla y que se conocen por sus frutos.
Un producto notable es la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que fue una pieza clave a lo largo del complejo proceso de descolonización del siglo XX.
No todos los estados son iguales –la realidad se ha impuesto– y existe el Consejo de Seguridad, integrado por cinco países como miembros permanentes (Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Rusia y China) con derecho de veto, lo que ha trabado las mejores decisiones en momentos cruciales de la historia. Hoy en ese Consejo hay diez países miembros, es rotativo y se conforma de manera plural.
Se le recrimina a la ONU su ineficacia y esta se intensificará por la labor de zapa que ejercen los nuevos imperialismos y personajes del tipo de Donald Trump o Vladimir Putin, jefes de potencias con asiento en el Consejo de Seguridad. La crítica nunca estará de más, pero muchas veces es injusta.
Hoy, a 80 años de la ONU, recuerdo a Immanuel Kant, filósofo que en 1795 abordó el tema de la paz en una de sus memorables obras de naturaleza política. En la más reciente biografía del pensador alemán (prusiano), debida a la pluma de Manfred Kuehn, se describen bastante bien sus aportaciones pioneras. De allá viene la idea de un “orden global apoyado en la paz” y con derechos para los “ciudadanos del mundo”.
Va mi reconocimiento a esta institución insigne en sus 80 años.


