Otra vez “El Chueco” burla al poderosísimo Escudo Chihuahua que se publicita hoy como Plataforma Centinela. Pero no nada más, también burló a la Guardia Nacional y al Ejército, de acuerdo a la información recibida del poblado serrano de Témoris.

Lo tuvieron cerca y se les escapó. Pero como en todas las razias, encontraron a otro supuesto delincuente al que ya designaron “operador” del asesino de los jesuitas y dos personas más en aquella región, que no hay que olvidar por el peso de los primeros.

La Plataforma Centinela, aún sin haber nacido, se presume como un ejemplo nacional de cómo se combate al crimen organizado, cuando que en las últimas semanas la delincuencia se ha incrementado con homicidios por ejecución, dolosos en un mes como el pasado octubre, catalogado ya como el más violento del año.

Confirmado esto, además, por el dato de que el estado de Chihuahua está en el deshonroso “top ten” de las entidades de la federación con mayor incidencia delictiva.

El secretario de Seguridad Público, Gilberto Loya, y el fiscal Roberto Fierro, está demostrado, no han dado el ancho para los cargos que ocupan, y además muestran cierto desinterés por abocarse a la tarea.

El primero continúa su trayectoria como un gran mentiroso, ya que habla de el Escudo Chihuahua y su plataforma como algo que está dando óptimos resultados, cuando todo mundo sabe que eso no es cierto, y el segundo, por sus nulos resultados en la tarea de perseguir, con causas bien sustentadas en mano, los delitos de los que se tiene noticia, ya que no todos son denunciados por la incredulidad ciudadana en la institución.

Ambos funcionarios gastan miles y millones de pesos en publicitar la política que se les encargó por la gobernadora María Eugenia Campos, mientras que a “El Chueco” le basta migrar de cueva para desmentirlos.