esparza-duarte30jul2014

Jesús Esparza, titular de todas las confianzas de César Duarte en la Auditoría Superior del Estado, ha hecho circular la noticia de que se gastará 2 millones de pesos –que debiera informar de dónde los saca porque no están presupuestados– para contratar a Transparencia Internacional a fin de que haga una evaluación del nivel de corrupción existente en Chihuahua. Y dice que Transparencia Internacional, no específica si se trata de su capítulo mexicano, como es dable suponer. La evaluación adquirida abarcará ámbitos diversos como el municipal, el estatal y aún el federal. Poco importa que este último esté fuera de su ámbito competencial. Quizá esta noticia tenga que ver con la idea de contrarrestar lo que por otros medios circula en la misma materia y que arroja datos que harían enrojecer de vergüenza a cualquier gobernante con mínimos escrúpulos. Habrá que estar atentos, especialmente para que no se nos vaya a dar gato por liebre y no porque dude de la solvencia de Transparencia Internacional, sino porque dependerá de aquellos que se evalúe, sobre todo si tenemos en cuenta que el gobierno actual ha recurrido a certificaciones a modo para presentarse como lo mejor, aunque la perecepción fundada desemboque en otras conclusiones. Por lo pronto, algún aficionado y que desee perder el tiempo, puede pedirle al ICHITAIP que se exhiba el contrato firmado con Transparencia Internacional, y si recibe la información, le agradeceríamos nos la participe. Si se tratara de ir al fondo, qué osado este señor, porque si viviera en el siglo XIX en el legendario Oeste, le esperaría una soga en un alto álamo ribereño del Chuvíscar, pues ya ven que esta pena ya en desuso es muy del gusto del que aún se hace llamar gobernador de Chihuahua. Desde luego estos instintos no están presentes en nuestra mente y le deseamos, más allá de los resultados, larga vida al auditor, y si es para bien, mejor.