Al senador Guadiana se le acaba la fe del carbonero
El empresario carbonero y senador morenista de la república, Armando Guadiana Tijerina, publica hoy a página completa en el periódico Reforma una carta al presidente López Obrador en la que denuncia a Ricardo Mejía Berdeja de utilizar las instancias del gobierno federal con fines electorales.
De suyo, y conforme a la austeridad morenista, publicar en ese diario ya es un privilegio que sólo muy pocos se pueden dar por el costo que implica. Pero más allá de eso, el contenido sorprende.
Como se sabe, Mejía Berdeja es un alto funcionario de la federación en el gabinete y funge como subsecretario de Seguridad Pública de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, pero sobre todo es fuerte aspirante a la gubernatura de Coahuila en la elección del año entrante.
Se trata de la vieja historia que repite MORENA, se hunde en el priismo y llega hasta al porfiriato: la de imponer gobernadores desde el centro de la república. Y como son cargos unipersonales, al decidirse deja dolientes que se pierden en la pista.
Coahuila es un apetecible platillo político para MORENA porque sería interrumpir más de ochenta años de hegemonía tricolor, como antes sucedió en el baluarte que era el estado de Hidalgo.
Se supone que para doblegar al PRI en la votación sobre la militarización, se pudo haber pactado la entrega de Coahuila. Es algo de difícil comprobación, pero que los hechos irán confirmando.
Un par de cosas llaman la atención en el desplegado de Guadiana Tijerina: en primerísimo lugar, que se dirija a López Obrador, cuando realmente se trata de un tema partidario, lo que demuestra que MORENA es un partido de Estado al que todos quieren recurrir con esa intención, su aparato electoral. La otra, que causa cierta pena ajena, es que el senador, famoso por su bigote y su tejana, le pida “piso parejo” al presidente para medir la figura principal hacia la candidatura y a la elección de 2023.
Todo lo anterior lo afirmo para poner en claro, realmente por si hubiera duda, que todas las candidaturas de MORENA se deciden en Palacio Nacional, donde vive el gran palomeador.
Algo más: el senador Guadiana Tijerina, aparte de vender carbón, es un cínico, porque lo que está pidiéndole al presidente es que lo nombre a él candidato y ahí se acaba el conflicto.