Cuando hay un proyecto político que entraña poder y dinero, es difícil ocultarlo más no construir las bases para su derrota necesaria. Las llamadas “fuerzas vivas”, salieron a la calle a través de los medios impresos a felicitar a María Eugenia Campos Galván como si cumplir con una obligación en asuntos públicos fuera un mérito sobrenatural, divino, excepcional. Mucho agua ha pasado por debajo de los puentes, pero no se ve cambio alguno en los estilos y formas de hacer política y eso tiene un contenido nefasto. 

Lo mismo la UACH, que el Poder Judicial, que las grandes empresas y los grandes corporativos inmobiliarios y de materiales publicaron desplegados a raudales aquí en la ciudad de Chihuahua, cómo andará esto, que hasta Armando Cabada se hizo presente y luego el comité directivo del PAN felicita a todos sus alcaldes, pero les carga las tintas a Maru. Comparecieron a esta nefasta convocatoria inducida desde el proyecto de poder quienes debieran guardar discreta reserva, particularmente frente a la mentira, porque se propalan mentiras y se expende cosmético político. 

En uno de los diarios de la ciudad se publicaron 130 desplegados de “agradecimiento y felicitación” prácticamente redactados por los agentes de publicidad que ya no encontraban adjetivos en el diccionario de la Real Academia Española para su tarea: 9 planas, 15 robaplanas, 86 cuartos y 17 de otros tamaños más pequeños. 

En la misma línea, otro de los periódicos vendió 98 espacios, más o menos en la misma proporción de los tamaños apuntados. 

Pero no sólo eso, un día después del informe, casa por casa y selectivamente en algunas colonias llegó un tabloide de 8 páginas con más apología de Campos Galván. Estos recuentos no han contabilizado que esta propaganda está cubierta con el desglose de los asuntos públicos, de tal manera que el volumen propagandístico es mucho mayor y las fotos de la candidata, perdón, de la alcaldesa, están por todas partes. Por cierto, en las páginas de El Heraldo, dada sus malas y viejas prensas, a veces los malos registros resaltan el pésimo maquillaje o las cirugías. 

Cuando hicimos estas cuentas, que pueden fallar en uno o dos números, un compañero me dijo: pero ahora Ausencio Miranda y el Negro Padre no publicaron sus desplegados; mi respuesta fue: como la puerta de Alcalá, ahí están.

Bien se ve que el estilo priísta de hacer política no se ha ido, que renace en el PAN como verdolaga en huerto de ejidatario. Con un efecto nefasto si todos te dicen que estás en los cuernos de la luna te la vas a creer y no tan solo te vas a marear, sino te vas a sentir en los dinteles del cielo. Y después que el pueblo la pague.