karla-jacott11feb2014

El gobierno municipal de Javier Garfio, carente de una capacidad real de prevención, opta por restringir las libertades, evidenciar que tiene su Big Brother y lanzarse contra la innovación tecnológica de una manera burda y tradicional. Lo hace a través de la Subdirección de Seguridad Pública Municipal, es decir, a través de un recurso policiaco. Así se desprende de las opiniones vertidas por Karla Jacott que dice trabajar en secundarias, preparatorias y primarias para orientar a los padres (y supongo madres) sobre el uso de internet y redes sociales. Nos habla la funcionaria -que por cierto aparece en la tarea de repartir volantes en la calle Libertad y a las afueras de la presidencia municipal- de que las redes empleadas por jóvenes únicamente se deben usar entre la familia, la mamá, el papá o los hermanos. Seguramente por sus aparatos de control, sabe hasta la hora en que arrecian los sitios peligrosos en la red y por eso lanza la alerta correspondiente. Allá en mis tiempos había un anuncio publicitario, pero a las diez de la noche que preguntaba: ¿sabe usted dónde andan sus hijos? Lo que quiero decir es que esta forma de aparentar trabajo no es nada nuevo. Se va contra las tecnologías, desconociendo los horarios de trabajo de gran parte de esos padres y madres de familia y, se revela que mientras el internet público es inservible, el municipio sí tiene presumiblemente cómo hacer acopio del tráfico a través de las redes, cuantificarlo y hasta en qué calidad se produce.

Es fácil concluir que Garfio ha ordenado su propia ley SOPA, que so pretexto de combatir la piratería, Estados Unidos quiso pasar a un control y despojo del empleo de las nuevas tecnologías en manos de la sociedad, igual que acontece en China y en los países más autoritarios.

Espuma y apariencia de trabajo, porque cuando en muchos puntos de la ciudad se requiere la simple presencia de una patrulla para disuadir la comisión de un delito, la dirección de la señora Jacott tarda, llega después de los hechos, o simple y sencillamente no aparece por ningún lado.