Xóchitl Gálvez vino a Chihuahua, y dio la apariencia de una recepción de masas que no significa más que un modesto acarreo. Vino en precampaña, buscando una candidatura sin adversario alguno al frente, un efecto más del profundo fraude a la ley que se vive en todo el país y del cual son actores todos los partidos sin excepción.
Aparte de reunirse con los panistas, lo hizo con priistas locales de primer nivel. Comentaré esto más ampliamente después, porque hoy me quiero referir a Patricio Martínez García, exgobernador del estado de Chihuahua al que ahora le tocó andar en la bola como acarreado, y para que mis lectores sepan la clase de adherentes que tiene aquí la abanderada del Frente Amplio opositor.
Lo haré recordando el libro El crimen sí paga, que publiqué en 2012, y del cual transcribo parte de una síntesis. Aquí va:
“Más que un libro, es un manojo de testimonios para no olvidar la infamia. Se trata de un negro momento de la vida chihuahuense”. Incluso aventuré que algún autor de novela negra se podrá ocupar del político corrupto, arrogante, que asumió el poder de manera unipersonal y sin contrapeso alguno, de 1998 a 2004, y se enriqueció a manos llenas por los negocios inmobiliarios y la especulación que maquinó. Empezó robando poco, y terminó haciéndose de una fortuna incalculable hasta hoy. Siempre he dicho que vendiendo libros no se llega a la bonanza.
También dije que hubo una violación sistemática a los derechos humanos que fue emblematizada por el feminicidio y por la simulación de justicia en el famoso caso de las mujeres encontradas muertas en el Campo Algodonero de Ciudad Juárez.
Un grupo de hombres y mujeres en su tiempo pretendió someterlo a un juicio político, y sólo produjo el testimonio de lo que es la impunidad y la actuación de personajes intocables del tipo de Martínez García.
Patricio Martínez no convenció a nadie, pero venció con una justicia a modo, y posteriormente fue premiado con un escaño en el Senado de la república.
En el juicio político al que me refiero, Patricio Martínez tuvo como defensor al diputado local César Duarte. Por algo será.
Del libro del cual consigno aquí los hechos narrados, tengo todavía una pequeña reserva que pongo a disposición gratuita para quien quiera tomarse la molestia de escudriñar en el pasado reciente de Chihuahua. Pueden recoger ejemplares en Calle 13 número 1608, de la ciudad de Chihuahua, exclusivamente por las mañanas.
Como conclusión puedo decir que este pájaro de cuentas ahora grita desde las gradas, con chamarra roja, para que Xóchitl Gálvez sea declarada formal y legalmente candidata a la Presidencia de la República.
Dime con quién andas y te diré quién eres. La misma Xóchitl realiza una precampaña sin contraparte alguna.