Tentativa de homicidio contra Ciro Gómez Leyva
Desde esta columna condeno la agresión al periodista Ciro Gómez Leyva. Ojalá se esclarezca a fondo, se transparente toda la información y no quede en la impunidad lo que a todas luces es una tentativa de homicidio. El hecho es de la mayor gravedad.
Brevemente quiero subrayar que a la luz de este acontecimiento, el ataque sufrido por Gómez Leyva ocurre en medio de la estigmatización que desde el Palacio Nacional se ha hecho una costumbre en contra de aquellos periodistas que opinan, critican y discrepan de la línea oficialista de la Cuatroté.
México, como se sabe, es un país en el que el periodismo se ha tornado en una profesión de alto riesgo. Hoy se agredió a un periodista de notoriedad indiscutible; en lo más mínimo desprecio a otros que han sufrido similares ataques que han perdido la vida; el estado de Chihuahua registra ya varios periodistas asesinados.
Pero este hecho cobra características especiales sobre las que no deseo especular, pero sí apuntar que se tornará en un ingrediente de la crisis de inestabilidad que lamentablemente nos prodiga la lucha por el poder en México. Por eso se debe aclarar a fondo.
Envío mi solidaridad a Ciro Gómez Leyva, a sus compañeros de trabajo, y especialmente a su familia, deseándole que tenga un ánimo redoblado para seguir adelante.