Columna

Marcos Bonilla relanza inútil fideicomiso

Acatando todas las reglas del ceremonial –traje negro, timing, espejuelos que dejan ver toda la cara– Marco Bonilla “puso” en operación un fideicomiso municipal que tiene por objeto el manejo del agua en la polis chihuahuense. Reconoció, en su discurso, que no hay competencia en esa materia, que no tiene facultades de ninguna índole y que nada tiene que hacer ahí.

Pero, de todas maneras, ahí está el fideicomiso. Así son los políticos de relumbrón, como ahora hablar del agua en Chihuahua está de moda, nada más natural que el alcalde intervenga en el tema, aunque no sea ni lo suyo ni lo del municipio.

Lo importante para él es verse como jefe y en lugar de trabar una buena relación del municipio con las Juntas de Aguas, aparece con lo que ya parece ser el signo del gobierno que inicia: mucha política, mucho cosmético y… nada de nada.