El recientemente formado Frente por la Unidad Democrática de Chihuahua emitió un documento mediante el cual se deslinda de José Luis Barraza en sus aspiraciones de convertirse en candidato independiente al gobierno del estado. Es importante destacar que se le reconoce su legítimo derecho a sus propósitos, como legítima es la posición del Frente de deslindarse del proyecto.

Este hecho fue dado a conocer mediante un comunicado de prensa, fechado el 10 de enero del año en curso y se contrae a lo siguiente:

“Un grupo de chihuahuenses convocamos el pasado 17 de diciembre a la conformación de un frente político y social por la unidad democrática de Chihuahua que, bajo una candidatura y un programa de gobierno común construya la más amplia coalición opositora para enfrentar al régimen corrupto y autoritario de César Duarte Jáquez que ha conducido a nuestro Estado a una de sus peores épocas.

Nuestro llamado y esfuerzos para lograrlo están vigentes y desde distintos ámbitos trabajamos para este propósito. Estamos convencidos que la unidad y no la atomización de las fuerzas democráticas de nuestra entidad puede lograr revertir las injustas y desiguales condiciones de vida de los chihuahuenses y vencer, aún en la mayor regresión autoritaria, el proyecto de perpetuación del tirano en el gobierno del Estado. Porque a la par, se dan también las mejores condiciones para lograrlo: un descontento generalizado entre la población, incluso entre las filas del mismo partido del Gobernador.

Por eso, reiteramos nuestra convicción de que partir de un gran Frente político y social que integre a partidos, organizaciones sociales, gremiales, colegios, ciudadanos en general, podemos potenciar la victoria ciudadana en contra de los enemigos de Chihuahua.

De ahí que también consideremos necesario informar con toda claridad que ni compartimos, ni es parte de nuestro proyecto, ni existe la intención de apoyar la candidatura independiente del Sr. José Luis Barraza.

Respetamos y coincidimos con la figura de las candidaturas independientes, cauces democráticos para ensanchar la participación política y mejorar la competencia electoral, pero no creemos que esa específica candidatura represente los anhelos de justicia y libertad, inclusión social y combate a la corrupción política y a la desigualdad social, que hoy exigen los ciudadanos de nuestro estado”.

Signaron el deslinde Jaime García Chávez, Javier Corral Jurado, Lucha Castro, Víctor Quintana, Alma Gómez Caballero, Gustavo Madero, Blanca Gamez, Gabino Gómez.

 

Nos resultó tradicionalista el diputado Alejandro Domínguez

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José Luis Domínguez.

Resulta significativo ver cómo el diputado Alejandro Domínguez realiza el trabajo político electoral encubierto en un ramplón discurso mediante el que dice defender las tradiciones mexicanas. Esto va desde el despropósito de no definirlas, entonces se puede entender por tradición defendible para este país la de su predilección, entre otras las que tienen que ver con la corrupción política a todos los niveles, desde la mordida, los moches y los grandes negocios de estado, como los perpetrados por César Duarte y su pandilla. Esta tradición es prehispánica, colonial y postrevolucionaria. Esta defensa de las tradiciones, asociables al pensamiento más reaccionario que en el terreno político se pueda tener, aprovechó vía el clientelismo partir la Rosca de reyes en reuniones multitudinarias que hoy son de toma tu rosca, que mañana nos la regresas en votos. De antaño sabemos que Alejandro Domínguez es un hombre de derecha, de tal manera que no causa ninguna extrañeza su desempeño reciente durante el receso en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión. No cabe duda, los priístas son incorregibles, más ahora que se disfrazan de Melchor, Gaspar o Baltasar.