Garfio: todavía no empieza y ya está listo

En reciente entrevista periodística, Javier Garfio se muestra tal cual es por su incapacidad para estar al frente de una ciudad como Chihuahua. Eso sí, no perdió la oportunidad para aparecer ataviado con la camiseta de la selección nacional (hasta lo presume en su perfil de Face), porque piensa que eso le da prestancia, imagen y probablemente no faltarán bobos que se traguen el ardid. Pero hay tres cosas que desnudan mejor al alcalde, por orden de importancia: afirmar que tanto el Vivebús –fracaso asociado a su persona– y la tragedia del Aeroshow no le quitan el sueño. En otras palabras, que ambas cosas le tienen sin cuidado, o como dice la gente, le vale, porque al común de los ciudadanos son dos cosas que le afectan grandemente: la primera por la cotidianidad tan pesada por las dificultades para la movilidad en una ciudad carente de urbanismo; y la segunda, por el dolor humano que causan las víctimas de la incuria y el descuido oficiales. Pero no solo: también el autobeneficiarse con la grilla interna en el PRI para sacar raja de todo eso que ellos, los del PRI, siempre lo consideran como materia para que nadie lucre.

Sorprende además que diga que ya está listo para su primer informe de gobierno, cuando falta prácticamente un tercio del ciclo del primer año que abarque su deshilachada administración. ¿Será adivino o qué? Hay que recordarle que unas horas antes de concluir su administración, Marco Adán Quezada ya estaba listo para entregar festivamente y ya ven lo que pasó. Pero Garfio ya está preparado, ingenuo si piensa que la sociedad está atenta de que allá por octubre se rendirá un informe municipal, porque a decir verdad, esas liturgias ya no le importan absolutamente a nadie, más allá del círculo rojo que rodea a estos políticos mediocres.

Y dentro de todo esto, lo más grave: ha dedicado, según sus palabras, a estructurar su administración; o sea, a perder el tiempo en demérito de los intereses de la sociedad. ¿Y todo para qué? Muy sencillo: estas estructuraciones llevan la finalidad de colocar a los amigos en puestos clave, hacer politiquería para apuntarse hacia el futuro, jugar de intendente de Duarte en otros territorios en los que nada tiene que hacer, y dañar, con el desperdicio de recursos, a una comunidad con tantas prioridades desatendidas como lo es el municipio de Chihuahua. Estas “restructuraciones” son la demostración de que cada vez es más necesario el establecimiento de un servicio civil de carrera, profesional, que impida que cada tres años se esté reestrenando todo, a grado tal que la estupidez menudea, como bien lo dijo en una carta una ciudadana que deplora que se estén plantando encinos en los camellones en lugar de en los parques y las escuelas, donde niños y jóvenes necesitan de sombras y aire limpio. Seguramente la señora ignora que para políticos como Garfio no hay política sin relumbrón y por eso hasta quiere aparecer como ese portero Ochoa que no permite que le metan nada.

Dejo para otra ocasión eso de que Chihuahua será vertical, porque la Corporación Técnica de Urbanismo y todas esas constructoras que han sembrado a diestra y siniestra la tragedia urbana, ahora quieren que Chihuahua crezca para arriba, verticalmente. Todavía no salimos de una y ya nos encaminan a otra.

Municipio de Aquiles Serdán: el PRI coludido con el crimen

De tiempo atrás se ha dado una mezcla peligrosa entre el crimen organizado y las autoridades municipales del pequeño Aquiles Serdán, municipio con un poco más de cien años de existencia y que prácticamente va hacia la integración y conurbación con el de Chihuahua. Todo empezó cuando para quitarle el poder al buen PRD del profesor Miguel Ángel Machuca se patrocinó al delincuente El Bachichas al que lo hicieron ganar con mucho dinero negro para que luego cayera estrepitosamente y a la postre resultara ejecutado, al igual que su suplente, Francisco García Girard (primo del senador Patricio Martínez García). Uno se pregunta qué tiene Aquiles Serdán que tanto les gusta a los delincuentes. Hace unos días se encontraron dos cadáveres en territorio de este municipio y ayer se detuvo a policías que montaron un retén ilegal en esa comunidad con el resultado de tres detenidos: Raúl Vaca Rodríguez, Daniel Vázquez Armendáriz y Héctor Ramón Delgado Muruato, todos ellos funcionarios de un gobierno marca PRI.

¡Ah, los masones!

Los masones, otrora, pero muy otrora, importantes, hoy son una especie de Club de Leones del PRI. Al parecer realizaron una tenida blanca para celebrar el solsticio de verano. Esto se entendía hace doscientos años como un triunfo de la luz sobre las tinieblas, metáfora muy válida. Pero resulta que no se han dado cuenta los chivos prietos que ellos hace mucho pasaron a ese mundo de las tinieblas en las que sólo se les ve, sobre todo, cuando ejecutan servicios de mapachería. Si a los masones les temieran hoy el uno por ciento de los que les temieron hace un siglo y medio, es probable que preocuparan a alguien. Esto no lo digo en una plancha porque no se a quién enviarlo, y de todos maneras quiero que me acusen recibo.