El domingo 13 de diciembre apareció, a plana completa, en un diario de la ciudad, un desplegado por el cual responde el señor Rogelio Martínez. Es de esas publicaciones importantes pero que al hojear el periódico se soslaya la página y pocos lectores penetran a su lectura.
Desapercibido y todo, es una publicación muy importante porque explica negocios que se hacen por el estado en el ámbito de la administración de la salud en el gobierno de Javier Corral, previene soluciones y lanza una alerta que no hay que perder de vista. No es raro, a la hora que se ha desatado la rapiña en el gobierno del depotismo corralista, que una publicación como la que comento termine con el lema “transparencia y equidad”, como divisa para sustentar al derecho universal a un mejor servicio de salud en Chihuahua.
Y es que se trata de una licitación, precisamente la número LA-908005999-E36-2020, que a decir del responsable, provoca incertidumbre sobre la equidad para la legal y libre competencia de los proveedores. Él advierte que no hay justificación racional para que haya un retroceso tecnológico analizando lo que ya existe y se quiera cambiar a través de un negocio oscuro.
Lo dice enfáticamente: “…el proceso licitatorio (…) presenta una serie de irregularidades importantes, suspicacias, aspectos técnicos y de temporalidad que deben ser analizados a profundidad y tomados en cuenta de manera más seria, profesional e imparcial por las autoridades de salud y demás secretarías involucradas del gobierno del estado de Chihuahua”.
El desplegado termina rotundo: “Las bases de la licitación no están dirigidas ni diseñadas para obtener un mejor servicio de laboratorio, ni tampoco para tener un manejo transparente de los cada vez más restringidos recursos con que cuenta el estado…”.
Este asunto debe estar en el ojo público porque es muy probable que haya la tentativa de consumar una corrupción más, sobre todo si consideramos que el secretario de salud impuesto contra viento y marea sea el arquitecto de la corrupción presente. No perderemos de vista este caso.
¿Tentativa? Por eso quiere dejar sucesor a como dé lugar, no importa si impone a un malandro represor por sus pistolas. Alerta, Chihuahua, alerta.
Y COMO DICEN LOS POLITOLOGOS «EL AÑO DE HIDALGO» ¡ALGO PARA SU SANTO!..Y EL PUEBLO QUE ¡CHILLE!…