En innumerables ciudades del país se dio una gran movilización para protestar por los asesinatos contra periodistas, fenómeno que va creciendo y hace de esa profesión un gran riesgo. Los recientes sucesos en Tijuana, en Veracruz y en otras partes convocan a levantar un frente unido para la protección y seguridad de los comunicadores, hoy a merced del poder político y de poderes fácticos como el crimen organizado. En las movilizaciones se esgrimió la divisa de que no se mata la verdad matando a los periodistas. Esta tarde que temprano llega.

Es una lucha que merece la solidaridad de todos los ciudadanos, sin distingos y sin facciosidades. A más elevada prensa, tendremos una mejor sociedad y avanzaremos en pluralismo y democracia.

Aquí en Chihuahua y en ciudad Juárez se realizaron manifestaciones numerosas, con la presencia de periodistas, reporteros y fotógrafos. Se pronunciaron discursos fuertes para reclamar al gobierno la seguridad necesaria para esta profesión.

En la ciudad de Chihuahua hubo una concentración en la calle Libertad a espaldas del Palacio de Gobierno, donde se mostraron fotografías de periodistas, mujeres y hombres, se dijeron sentidos y argumentados discursos y fue gratificante distinguir entre el auditorio a miembros de los más variados medios.

Se recordó a Miroslava Breach y se cuestionó la ausencia de una justicia plena, pronta y en lo que cabe restitutoria, porque ya la vida de los y las sacrificadas no volverán.

Hay que redoblar el paso.