El PAN ocupó la Presidencia de la república durante doce años, ha tenido no pocas gubernaturas en estados clave y una gran relevancia congresional, pero jamás intentó en serio y a fondo realizar una reforma federalista que se ha venido postergando peligrosamente. En sus aspectos fiscales y hacendarios, el PAN ocupó los poderes referidos y dejó pasar, quizá porque antepuso otro tipo de intereses, a los que tiene la nación. 

Producto de esta ineficiencia y falta de visión de estado, a Vicente Fox le estalló el problema en las manos y apareció la famosa CONAGO como un remedo de la ausencia federalista, una CONAGO que violenta un precepto constitucional que la prohibe. 

Ahora, con motivo de que se dio a conocer el paquete económico que puede llegar a regir en 2020 y que el reparto propuesto abre los tradicionales hoyos que dan pábulo a la iniquidad y al centralismo, surgen voces que, de concretarse en hechos por carecer de un proyecto viable y sustentado, a lo que puede conducir es a balcanizar la república. 

Lo que se hace tarde, por los propios errores y la falta de pericia, también por la carencia de visión, lo cobra caro la historia concreta de los que al atardecer descuidaron lo que debieron haber hecho en la aurora.